Alguna vez existió un tren de pasajeros entre Santiago y Cartagena. Hoy no existe el tramo del ferrocarril que bordeaba el mar entre San Antonio y el balneario. Fueron seis kilómetros de una vista al mar impresionante recorridos sinuosamente. La estación de Cartagena fue rescatada y hoy es un centro de actividades culturales. De la vía férrea no quedó nada.
Un poco antes de su total desmantelamiento tomé esta fotografía. Un símbolo del abandono y la corrosión que provoca el óxido del olvido.